Los desastres ocasionados recientemente por temporales como Ingrid
y Manuel han revelado varios asuntos importantes que competen al ámbito de
seguros, que finalmente tienen que ver con el patrimonio y la economía de la
gente. Para empezar, la pobre cultura de seguros que persiste en todo el país: según
cifras oficiales, debido a los fenómenos meteorológicos antes mencionados se registraron pérdidas por 75,000 millones de pesos, de las
cuales el sector asegurador sólo pagará 20% (15 mil millones de pesos) “porque
en las zonas afectadas no hay mucha penetración del seguro”, señaló a los medios
Recaredo Arias Jiménez, director general de la Asociación Mexicana de
Instituciones de Seguros, AMIS.
En este contexto, persiste un mito: los seguros
son muy caros. Esto no es necesariamente cierto. Actualmente hay seguros que
se adaptan a casi cualquier bolsillo. Además, la relación costo beneficio es
innegable, sobre todo al momento de necesitarlo.

Al final, tras la tempestad, por hacer caso a creencia como las anteriores,
miles de personas quedaron sin nada, perdieron su patrimonio y muchos se
endeudaron sin remedio, comprometiendo incluso a generaciones futuras.
Para evitar eso, lo mejor es informarse. En primer lugar, averiguar
qué aseguradoras tienen una buena reputación en donde uno vive. Luego,
preguntar sobre los planes que nos interesa, solicitando datos específicos sobre
coberturas, tiempos y costos. Un paso importante es acudir a un asesor de seguros
profesional, quien deberá proporcionarle toda la información que necesita y ofrecerle
las mejores opciones para su caso. Finalmente, al recibir la póliza, es importante revisar las condiciones generales del seguro y su contrato hasta en el último
detalle para cerciorarse que es lo que usted necesita realmente. Si es así, lo
mejor es pagar inmediatamente el o los recibos correspondientes, pues el tiempo
corre y los riesgos aumentan; de lo contrario, es recomendable acudir con
nuestro asesor para señalarle los errores y pedirle la corrección de los
mismos.
Recuerda que conforme más sepas sobre el rubro de los
seguros, sus beneficios, ventajas, las coberturas y limitaciones, lo que
realmente significa un seguro –una inversión más que un gasto- mejor estarás
protegido. Apóyate en tu asesor si tienes dudas. En este asunto de los
seguros, él es tu mejor amigo, no lo olvides.
Te deseo un otoño próspero y buena salud
Saludos
Ma. Carmen Blanca Carrasco
Asesor de Seguros